Francia y el Reino Unido han establecido numerosas asociaciones tecnológicas, comprometiéndose a trabajar en el fortalecimiento de su infraestructura crítica, establecer vínculos más estrechos en supercomputación y colaborar en la investigación sobre inteligencia artificial (IA).
Las declaraciones se produjeron durante la visita del presidente francés Emmanuel Macron al Reino Unido, donde afirmó en un discurso en la Universidad Imperial College de Londres que es crucial que ambas naciones trabajen juntas en IA, dado que enfrentan el mismo desafío de rezago frente a Estados Unidos y China.
Colaboración en Supercomputación y IA
En este contexto, el gobierno del Reino Unido anunció el lanzamiento de una asociación en supercomputación con Francia, liderada por el Centro de Supercomputación de Bristol y GENCI, una instalación en Francia.
Ambos países colaborarán en esfuerzos para aumentar la capacidad de procesamiento y compartir las mejores prácticas en IA, con el objetivo de “acelerar los avances” en este campo.
Estos esfuerzos refuerzan el Plan de Acción de Oportunidades en IA del gobierno del Reino Unido, que cuenta con un presupuesto de £14 mil millones y está diseñado para impulsar el uso de esta tecnología en toda la economía.
Inversiones y Amenazas Evolutivas
Francia y el Reino Unido ya están trabajando juntos en el ámbito de la IA, comprometiéndose a realizar trabajos técnicos en investigación de frontera, especialmente en torno a la seguridad nacional.
En una declaración extensa, el gobierno del Reino Unido también mencionó las inversiones realizadas por BT Group en Francia, que totalizaron aproximadamente £130 millones en el último año fiscal, conectando a más de 80 empresas francesas.
Además, la empresa de ciberseguridad francesa Thales planea realizar una inversión de £40 millones en investigación y desarrollo centrada en IA, como parte de su cortAIx UK AI Accelerator, que servirá como punto focal para el trabajo de la compañía en esta tecnología en el Reino Unido.
Esta iniciativa ayudará a ambos países a “mantenerse por delante de las amenazas en evolución y liberar el potencial de la IA para aumentar el éxito en las misiones”.
Aparte de la IA, investigadores de ambos países trabajarán en proteger la infraestructura crítica, incluyendo suministros de energía y servicios de emergencia, desarrollando sistemas de navegación y temporización más resilientes.