Google ha decidido retirar su denuncia antimonopolio contra Microsoft en la Unión Europea (UE), a tan solo una semana de que los reguladores iniciaran una investigación formal sobre el mercado de la computación en la nube.
La empresa matriz de Google, Alphabet, había presentado una queja ante la Comisión Europea (CE) el año pasado, acusando a Microsoft de prácticas anticompetitivas que supuestamente obligaban a los clientes a utilizar su plataforma de nube Azure.
Retiro de la queja y nueva evaluación
Según Reuters, Giorgia Abeltino, responsable de asuntos gubernamentales y políticas públicas de Google Cloud Europa, indicó que la compañía está retirando su queja “a la luz del reciente anuncio de que la CE evaluará las prácticas problemáticas que afectan al sector de la nube a través de un proceso separado”.
Recientemente, la CE inició una investigación para determinar si las características estructurales de la industria de la computación en la nube están contribuyendo a reforzar el poder de mercado de actores como Azure y Amazon Web Services (AWS).
Colaboración con reguladores y el futuro del mercado
Abeltino añadió que Google “continúa trabajando con responsables políticos, clientes y reguladores en la UE, el Reino Unido y otros lugares para abogar por la elección y la apertura en el mercado de la nube”.
La investigación de un año por parte de la CE podría llevar a que proveedores de nube como Azure y AWS sean designados como “guardianes” bajo la Ley de Mercados Digitales de la UE, lo que les sometería a estrictas regulaciones diseñadas para limitar el dominio del mercado y promover la competencia.
Solución amistosa
Microsoft ha rechazado previamente las acusaciones de Google. En julio de 2024, la empresa llegó a un acuerdo de 20 millones de euros con la asociación comercial CISPE para resolver una queja antimonopolio diferente sobre sus prácticas de licencias en la nube. Posteriormente, un representante de Microsoft afirmó que esperaban que la Comisión desestimara la queja de Google.
“Microsoft solucionó de manera amistosa preocupaciones similares planteadas por proveedores europeos de nube, incluso después de que Google esperara que continuaran litigando”, afirmó la compañía en ese momento. “Tras no poder persuadir a las empresas europeas, esperamos que Google tampoco logre convencer a la Comisión Europea”.
