La disminución de la jornada laboral de 40 a 37,5 horas semanales sin afectar el salario está cada vez más cerca de lograrse. Durante el próximo período legislativo, se implementará esta destacada medida para generar empleo de alta calidad, gracias al acuerdo alcanzado ayer entre Sumar y PSOE para formar un nuevo Gobierno de coalición, siempre y cuando obtengan los apoyos necesarios para la investidura. El comunicado conjunto emitido esta mañana por ambas agrupaciones explica que se llevará a cabo una reducción gradual mediante una ley: en 2024 se alcanzarían las 38,5 horas semanales y en 2025 las 37,5 horas.
Se ha consultado a más de 1.800 empresas sobre este asunto por parte de InfoJobs, y según los resultados obtenidos, la mitad de las compañías se muestran contrarias a cualquier disminución de la jornada, sin importar las condiciones. Es relevante tener en cuenta que en el último Informe sobre la Jornada Laboral de 4 días llevado a cabo por InfoJobs entre la población activa, el 62% de los empleados estaría dispuesto a reducir su jornada a 4 días sin perder sueldo, pero conservando el mismo nivel de rendimiento.
«A fin de que este enfoque laboral sea viable y triunfe, es indispensable en primer lugar que esta problemática se analice de manera interna en las compañías para comprender la casuística y disposición de organizaciones y profesionales; y, en segundo lugar, demanda de la imprescindible cooperación y conversación de los actores sociales». (Mónica Pérez, responsable de Comunicación y Estudios de InfoJobs)
Aquellas compañías con trabajo totalmente en línea son las más receptivas.
En cuanto a las empresas que ven favorablemente esta transformación, se observa que un 19% estaría dispuesto a disminuir la duración laboral a 4 días sin disminución de los ingresos y manteniendo el mismo nivel de eficiencia. Además, un 18% asegura que implementaría esta medida sin modificar el número de horas trabajadas ni el salario. Los enfoques que implican una disminución proporcional (12%) o nula (10%) de las remuneraciones muestran los resultados más bajos. En general, las empresas no se muestran inclinadas a adoptar esta iniciativa.
Las compañías que han implementado el trabajo remoto en su totalidad son las más receptivas a la posibilidad de adoptar una semana laboral de 4 días. Conforme a una investigación, el 28% de dichas empresas estaría dispuesto a disminuir las horas y el salario, pero sin afectar la productividad. Por otro lado, el 24% menciona la alternativa de reducir el sueldo de forma proporcional. Por último, las empresas que siguen un modelo de trabajo no presencial respaldan principalmente la idea de mantener el mismo número de horas semanales en menos días, sin cambios salariales.